Autor: Lucas Raspall.

Si hay suelo, no hay techo: la metáfora es clara y sirve para señalar la misión de esta expedición. Para ello, con los sentidos bien abiertos y sin prisa, iremos explorando a lo largo de todo el viaje tu historia y tu presente, demorándonos en las situaciones más importantes -las cotidianas- de la crianza. En cada pausa, la búsqueda estará orientada por una reflexión que surge a partir de un posteo que he realizado, en algún memento, en redes sociales: se trata de las principales estaciones de este viaje. En la travesía te encontrarás también con algunas paradas especiales, detenciones en las que buscaré contarte -con un lenguaje llano y de la manera más ágil posible- la evidencia y los fundamentos que sostienen cada una de las reflexiones. Acompañándote en la marcha, en silencio -o no tanto-, estará tu hijo o hija: él o ella será tu guía, no yo. iAllá vamos!
La parentalidad positiva, que destaca la prevalencia del interés superior de niñas y niños por encima de cualquier otra consideración, concibiéndolos como sujetos de derechos y reparando en su participación activa en la familia y la sociedad, debe salir de lo abstracto para pasar a lo concreto. Y lo tangible y preciso se traduce en las prácticas de crianza, protagonizando madres y padres la promoción de vínculos afectivos estables, protectores, saludables y seguros.

si hay suelo, no hay techo

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Autor: Lucas Raspall.

Si hay suelo, no hay techo: la metáfora es clara y sirve para señalar la misión de esta expedición. Para ello, con los sentidos bien abiertos y sin prisa, iremos explorando a lo largo de todo el viaje tu historia y tu presente, demorándonos en las situaciones más importantes -las cotidianas- de la crianza. En cada pausa, la búsqueda estará orientada por una reflexión que surge a partir de un posteo que he realizado, en algún memento, en redes sociales: se trata de las principales estaciones de este viaje. En la travesía te encontrarás también con algunas paradas especiales, detenciones en las que buscaré contarte -con un lenguaje llano y de la manera más ágil posible- la evidencia y los fundamentos que sostienen cada una de las reflexiones. Acompañándote en la marcha, en silencio -o no tanto-, estará tu hijo o hija: él o ella será tu guía, no yo. iAllá vamos!
La parentalidad positiva, que destaca la prevalencia del interés superior de niñas y niños por encima de cualquier otra consideración, concibiéndolos como sujetos de derechos y reparando en su participación activa en la familia y la sociedad, debe salir de lo abstracto para pasar a lo concreto. Y lo tangible y preciso se traduce en las prácticas de crianza, protagonizando madres y padres la promoción de vínculos afectivos estables, protectores, saludables y seguros.